Con 500 Unidades Tributarias Mensuales (UTM), equivalentes a más de $18.000 millones, sancionó la Secretaría Regional Ministerial de Salud a la empresa Bayesa S.A. por la infracción de las normas relativas a cloración de las aguas servidas. No se no habría informado oportunamente a la autoridad sanitaria de la escasez de cloro en el país y los problemas que estaba experimentando la firma encargada de la planta de tratamiento de aguas servidas de Antofagasta.

El Dr. Marcos Madrigal, Seremi de Salud Región Antofagasta, detalló que el Sumario obedece a 3 infracciones: El incumplimiento de las resoluciones 095 y 550, de 1993 y 1991 de la Autoridad Sanitaria, que establecen que los niveles de cloro residual para los efluente y en los predios agrícolas, deben ser respectivamente, 0,8 mg/l y 0,6 mg/l. 

En segundo término, añadió, niveles de coliformes fecales sobre la norma permitida (1000NMP/100ml) en el agua tratada tanto en la planta de tratamiento como en las quintas de la ciudad. 

Y en tercer lugar, la disposición de que toda contingencia relativa a desperfectos de plantas elevadoras, planta de pretratamiento, planta de tratamiento y emisario submarino, debía ser comunicada en forma inmediata al Servicio de Salud Antofagasta (hoy Seremi de Salud) vía fax dentro de las 24 horas de ocurrido los hechos.  Esto, de acuerdo a la Resolución N° 2229 de la propia Autoridad Sanitaria. 

ANÁLISIS DE LABORATORIO 

Los análisis del Laboratorio de la Seremi de Salud, demostraron que efectivamente Bayesa bajó los niveles de cloración, asunto que ellos mismos reconocieron expresamente, según consta en el proceso sumarial.  "Como efecto colateral, se ha producido en el país una disminución en la disponibilidad del hipoclorito utilizado para la desinfección de las aguas tratadas en la planta de tratamiento de Antofagasta, razón por la cual, se decidió ajustar a la baja la adición de desinfectante a niveles que permitieran mantener los resultados coliformes fecales por debajo de la norma".

Igualmente quedó  de manifiesto que el agua tenía niveles de coliformes que superaban la norma, mientras que el aviso de los problemas de cloración se efectuó sólo el 15 de marzo, en circunstancias que la entidad supo de la contingencia, 7 días antes, exactamente el 8 de marzo. 

EXIGENCIAS 

El Dr. Madrigal explicó  que la prohibición de abastecer de agua a las quintas de la Chimba se mantendrá sobre Bayesa hasta que ésta disponga de un sistema automático de cloración efluente de la planta, de manera de asegurar que se cumpla en todo momento con los niveles de cloro libre y coliformes fecales, además la entidad deberá contar con un registro automático de dosificación en línea respecto del sistema de cloración antes señalado, el que será revisado permanentemente por la Autoridad Sanitaria.

La mala cloración del agua habría provocado el brote de enfermedades gastrointestinales que afectó a miles de habitantes de la Segunda Región entre marzo y abril.