Un categórico llamado a los padres a cuidar a sus hijos, respecto del uso de las masas-juguetesconocidas como “slime”, efectuó la Secretaria Regional Ministerial de Salud, Rossana Díaz Corro, destacando que la adquisición de estos productos debe efectuarse sólo en lugares autorizados y que su manipulación debe contar con la debida supervisión de un adulto responsable.

Las declaraciones de la personera, tuvieron lugar en el marco de una actividad de fiscalización realizada esta mañana por profesionales de la Area de Salud Ambiental de la Seremi de Salud en el comercio céntrico de la ciudad y en el contexto de la política de trabajo en terreno esgrimida por el Gobierno del Presidente Sebastián Piñera.

CERTIFICACION DE ANALISIS QUIMICOS

En la oportunidad, los fiscalizadores de la entidad sanitaria, exigieron a los comerciantes, la presentación de los respectivos certificados de análisis químicos y de procedencia de los artículos, medida que por cierto garantiza la protección de quienes los adquieren, en especial de los menores de edad.

Aún así, Rossana Díaz, fue enfática al indicar que la compra y manipulación de esta masa húmeda, elástica y de consistencia viscosa, y que tiene distintos colores, debe efectuarse con la debida precaución, “los padres deben adquirirlos sólo en lugares establecidos, no el comercio ambulante y siempre deben estar atentos respecto al uso que sus hijos hacen de éstos”. 

PRODUCCION CASERA

En el mismo ámbito la Secretaria Regional Ministerial, señaló la inconveniencia y peligro que reviste la elaboración de juguetes caseros, a partir de preparaciones que se explican en Internet, como ocurre en el caso del “slime”, destacando que los menores de edad no deben manipular sustancias químicas como solventes y diluyentes u otros.  Esto, por los problemas que pudieran acarrear en desmedro de salud e integridad.

Respecto de los 14 niños que supuestamente habrían presentado cuadros de intoxicación, información que apareció el pasado viernes en la prensa capitalina, Rossana Díaz Corro, manifestó que tales hechos no están acreditados, y que por ahora se trata más bien de consultas efectuadas al Ministerio, por los padres de los menores supuestamente afectados.